Mesa redonda sobre el evento tradicional como intangible para la proyección del territorio
El 24 de febrero se celebró en la Universitat Jaume I otra jornada sobre el evento tradicional, bajo la dirección de Estela Bernad, profesora del departamento de ciencias de la comunicación y vicesecretaria de adComunica.
En la mesa redonda participaron las siguientes personas relacionadas con el mundo del evento cultural y tradicional: Inés Casanova, técnica del Patronato de Turismo; Enrique Masó, presidente de l’Aljama; Luís Oria, Prohom de la Germandat dels cavallers de la conquista; Juanjo Trilles, del Institut d’etnologia i Cultura Popular y Amparo Pitarch, Indumentarista (Confecciones Amparo Pitarch) y ex miembro Junta Fiestas y fue coordinada por Estela Bernad, profesora de la UJI y vicesecretaria de adComunica.
En la Comunidad Valenciana, existen ciudades que poseen como una parte de sus cualidades y valores más reconocibles, sus fiestas tradicionales, como es el caso de Castellón y Las Fiestas de la Magdalena.
Es por este motivo, por el que los formadores de futuros profesionales de la comunicación se preocupan de que la organización que tales eventos conlleva se realice de manera estratégica y organizada, pues en muchos casos va a suponer, una oportunidad única para mostrar al visitante y al propio ciudadano, el territorio, la ciudad, en todo su esplendor. Por eso, de su correcta y profesional organización, cuidando todos los detalles, dependerá conseguir construir una buena reputación en torno a la ciudad e instituciones que lo organizan.
Los eventos requieren grandes dosis de protocolo, tradición y costumbres, pues en ellos convergen personalidades del momento social de la zona, y es un escaparate magnífico para mostrar al exterior todo lo positivo, peculiar y singular, como por ejemplo lo sucedido recientemente en la cridá a Rita Barberá y el Caloret, que ha dado la vuelta al mundo, en este caso, generando una imagen negativa.
No es de extrañar que cada vez más, las ciudades aprovechen estas ocasiones anuales para introducir innovaciones y novedades que, sin modificar la esencia propia de la fiesta transmitan aquellos valores que la ciudad posee y sobre los que se construye su imagen de marca.
En la mesa redonda se habló de los intangibles comunicativos que tienen las fiestas de la Magdalena, muchas veces no suficientemente reconocidos por los foráneos y que sin embargo llenan de admiración el imaginario del turista ocasional. El auditorio asistente, mayoritariamente de fuera de la ciudad de Castellón, aportó su opinión sobre los elementos más valorados y diferenciadores de nuestras fiestas y tradiciones, siendo las Gaiatas, el principal elemento diferenciador para nuestras fiestas. La luz, como elemento propio y máxime este año, en el que la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó en su LXVIII sesión el año 2015 como Año Internacional de la Luz y de las Tecnologías basadas en la Luz. Dicha resolución cuenta con el copatrocinio de 35 países entre los que se encuentra España.
Aprovechar estos elementos diferenciadores, y proyectar a través de los intangibles comunicativos de nuestras fiestas la ciudad de Castellón para un turismo experiencial, más culto e integrado, requiere de un esfuerzo por parte de las instituciones, empresas y ciudadanía y un trabajo estratégico, que debe comenzar por sus públicos internos.